De que estamos inmersos en la economía digital creo que ya nadie duda.
De que en esta economía se generan nuevos retos, nuevas oportunidades y nuevos riesgos, que se reescriben las reglas de la competencia y se reestructuran los mercados, tampoco creo que existan muchas dudas.
Lo que ahora se deben plantear las empresas es cómo, primero sobrevivir, y luego destacar, en esta economía digital.
En su libro 'Leading digital', George Westerman, Didier Bonet y Andrew McAfee, nos cuentan un estudio realizado sobre más de 400 empresas con un papel destacado en este mundo digital y, una de las primeras conclusiones que obtienen es que para aprovechar ese mundo digital, para conseguir una posición estratégica destacada en él, es necesario dominar dos grandes dimensiones.
- Capacidades digitales: la capacidad para identificar en qué tecnologías es más importante invertir y cómo hacerlo. Además, el reconocer cómo aplicar las tecnologías para transformar la forma en que funciona el negocio. Algunas de las tecnologías que parecen especialmente relevantes son, para estos autores, social media, movilidad o analítica.
- Capacidades de liderazgo: de convertir la tecnología en una transformación, de establecer una dirección, generar el impulso necesario para perseguirla y asegurar que la compañía se mueve en la dirección adecuada mediante una fuerte gobierno y coordinación.
Dos dimensiones fáciles de enunciar y de entender...pero muy difíciles de aplicar, especialmente, creo, lo que a liderazgo se refiere, en sus dos facetas: primero generar la visión adecuada y luego conducir a la compañía en esa dirección
Pero el reto de la transformación digital no sólo vale la pena... es que es imprescindible.
No hay comentarios:
Publicar un comentario