lunes, 13 de junio de 2022

Sobre dinero y criptomonedas

Hace poco hablábamos del posible impacto de blockchain en la economía, y cómo hablar de criptomonedas es mucho más que hablar de tecnología, por avanzada y sofisticada que sea ésta, siendo también muy importantes los conceptos económicos y conductuales subyacentes.

Un poco en esa línea, y siguiendo con las más que interesantes aportaciones del libro 'Token Economy: How the Web3 reinvents the Internet' de Shermin Voshmgir al que me he referido en los últimos posts, volvemos ahora la mirada al dinero, al puro dinero, y hasta qué punto las criptomonedas pueden, en un sistema económico, jugar ese papel de dinero.

Pero, precisamente, porque las implicaciones no son específicamente técnicas sino económicas, conviene antes repasar o tener claros algunos conceptos sobre economía y, específicamente, sobre el dinero.


Dinero y moneda


Y en esa labor nos ayuda la propia Shermin Voshmgir recordándonos la esencia de eso que hemos dado en llamar dinero. Así, la autora nos recuerda que el propósito del dinero es facilitar los intercambios económicos de bienes y servicios y que sirve para tres propósitos:


  • Mecanismo de intercambio

  • Almacén de valor

  • Unidad de contabilización

Y lo que denominamos moneda ('currency') es un sistema de dinero para un grupo cerrado de personas.


Propiedades del dinero


Además, nos recuerda las propiedades que debe tener ese dinero:


  • Liquidez: el sustrato que que representa el dinero debe ser fácilmente intercambiable con bajos costes de transacción.

  • Divisivilidad y portabilidad: Debe ser fácilmente transportable (lo que, entiendo, viene a implicar una, digamos, realidad física 'ligera', como es el caso de monedas y billetes o, incluso, en el mundo moderno, sin realidad física y más bien realidad lógica y digital). Además, debe ser repartible en fracciones de nuevo con muy bajos o nulos costes.

  • Fungibilidad: que quiere decir que todas las unidades de dinero son exactamente iguales, valen igual, independientemente de, por ejemplo, su historia.

  • Durabilidad: es decir, puede ser usado de manera repetida, con lo que cumple con la misión de actuar como almacén de valor.

  • Estabilidad: es decir, que su valor no debería fluctuar demasiado porque entonces deja de ser un almacén fiable de valor y es imposible prever o planificar con base en él.

  • Reconocible: es decir, el valor de un elemento de moneda debe ser fácilmente reconocible.


Tipos de dinero


Y, finalmente, nos recuerda los tipos de dinero con que nos podemos encontrar:


  • Dinero mercancía ('commodity money'): se trata de un objeto físico con un valor intrínseco y estandarizado. Históricamente, se ha utilizado el oro u otros metales preciosos, la sal o incluso los cigarrillos. El precio se determina por comparación entre el valor percibido del producto en relación con otros productos.

  • Dinero representativo ('representative money'): un medio que representa algo de valor pero que tiene poco valor realmente en sí mismo. Es el caso, por ejemplo, de billetes o monedas respaldados por oro.

  • Dinero fiduciario ('fiat money'): Establecido por un gobierno, norma, etc de manera similar a un cheque o billete. No tiene un valor físico intrínseco y, claramente, el valor que representa es mucho mayor que el que realmente posee. En el mundo digital actual, la mayor parte del dinero existe sólo como meros registros bancarios, normalmente computerizados.


Criptomonedas como dinero


Armados con todos esos conceptos, ya podemos brevemente repasar el posible papel de las criptomonedas, tipo Bitcoin, como dinero.

Parece evidente que el propósito de Bitcoin es constituirse en dinero, un dinero, eso sí, gestionado en un modelo P2P sin bancos centrales y sin traducción a monedas nacionales y dinero fiduciario. En ese sentido, la autora nos dice que:


Protocol tokens have certain properties of money, however, they seem to have more similarities to commodity money or representative money than to fiat money.


Es decir, estamos ante algo que se parece mucho más a cuando pagábamos con oro, que el sistema fuertemente fiduciario actual que depende claramente de autoridades centrales. Sin embargo, aquí es importante una distinción. Este tipo de tokens que recuerdan más a dinero mercancía, son los llamados 'tokens de protocolo'. Existen sin embargo otros tipos de 'tokens, los tokens de aplicación, en que con cierta frecuencia sí se emiten por entidades centrales como una compañía, consorcio o fundación.

Aparte de esto, las criptomonedas, como el Bitcoin, suelen presentar otros dos tipos de problemáticas que dificultan su uso como dinero.

Por un lado, tenemos el aspecto de la estabilidad. Es bien conocida la inestabilidad y fuertes fluctuaciones de las criptomonedas ya que en general no están bien diseñadas para garantizar estabilidad de precios. Con esto, atentan contra una de las propiedades clave del dinero como almacén de valor.

La autora también hace ver que muchos tokens actuales no tienen lo que denomina 'privacidad integrada por diseño', es decir, cada token tiene su historia, no privada, y eso es una dificultad para la fungibilidad, el uso indiferenciado de un token, independientemente de su historia y las manos por las que pueda haber pasado. 

Finalmente se destacan los problemas de escalabilidad (las infraestructuras de blockchain actuales son seguras pero no escalables) y de usabilidad donde, por ejemplo, a veces se necesitan 'wallets' diferentes para usar diferentes tipos de tokens y donde la gestión e claves es compleja.


Conclusiones


¿Significa esto que las criptomonedas están fatalmente condenadas a permanecer como nicho y no poder alcanzar el 'status' de verdadero dinero?

No. No lo creo. No necesariamente, me parece.

Sólo significa que hay cosas que mejorar, dificultades a vencer y que todavía quedan unas cuantas cosas por hacer antes de que una criptomoneda pueda funcionar de manera generalizada y a gran escala como una moneda normal.

Pero hay interés y mucho trabajo en curso.

Veremos...


viernes, 10 de junio de 2022

DAOs y poder: ¿Desafía blockchain al gobierno tradicional?

En los últimos posts estoy comentando algunas de las implicaciones de blockchain, más allá de la pura tecnología o del muy conocido uso como base tecnológica para las criptomonedas como el bitcoin.

Ya he hablado sobre la visión más global de una nueva forma de economía ('criptoeconomía') y de la gestión de la identidad según el concepto de identidad digital auto-soberana, todo ello basado en lo que me he encontrado en el, creo, magnífico libro 'Token Economy: How the Web3 reinvents the Internet' de Shermin Voshmgir.

Pues hoy toca hablar de 'gobierno' y de organizaciones descentralizadas que se apoyan en blockchain, las DAO ('Decentralized Autonomous Organization'), e intentar valorar si nos encontramos ante un modelo disruptivo.


Blockchain como disrupción del gobierno


Y es que, la propia Shermin Voshmgir parece considerar que blockchain, a través de este concepto de DAO, trae consigo una revolución en el 'gobierno' mundial avisando por mi parte, eso sí, que al hablar de 'gobierno' estamos traduciendo el término inglés 'governance', lo que quiere decir que no hablamos sólo de gobierno en el sentido político de esa palabra, no sólo del gobierno de los estados, aunque también, sino en la dirección y gestión general de la sociedad en todos los aspectos.

En cualquier caso, y con esa percepción de disrupción, Voshmgir nos dice: 


Blockchain networks and similar distributed ledgers can disrupt traditional governance structures and challenge the current forms of how society organizes itself.


Por supuesto, la tecnología blockchain es importante como habilitadora de esta posible disrupción, pero lo que realmente es disruptivo es la forma de utilizarla.

Recordemos que blockchain es una tecnología que proporciona plataformas altamente confiables y trazables para la realización de transacciones y gestión de activos todo ello bajo un modelo P2P (peer-to-peer) sin autoridades centrales sino usando un mecanismo de consenso.

Por supuesto, esa es la forma de blockchain más pura, la forma del blockchain público como pueden ser el propio bitcoin o Ethereum pero no necesariamente la forma que adopta en las plataformas de consorcio ni, por supuesto en las privadas. En general, cuando se habla de Web3 y las disrupciones de blockchain se suele pensar preferentemente en este modelo 'público'.


Las DAO (Decentralized Autonomous Organizations)


El concepto que de alguna manera implementa esta eventual disrupción del 'gobierno' son las DAO, en las cuales juega un papel fundamental el modelo descentralizado (P2P) del blockchain público. En efecto, la misma autora, Shermin Voshmgir, nos explica lo que es una DAO:


Decentralized Autonomous Organizations involve a set of people interacting with each other according to a self-enforcing, open-source software protocol in the abscene of bilateral agreements.


Es decir, estamos hablando, en cierto sentido, de una organización virtual, un grupo de personas que interactúan a través de tecnología pero que no están (o no necesariamente están) constituidos como empresa, asociación, comunidad ni ningún otro marco legal tradicional, ni la supervisión de ninguna autoridad. Simplemente, interactúan. Y esa interacción está apoyada en un software que, de alguna manera, asegura que las transacciones o interacciones del tipo que sean, son seguras y se hacen conforme a los protocolos de la red.

En cierto modo, y como también se nos menciona, estamos hablando de una especie de 'tribus', unas 'tribus' autónomas:


DAOs can be seen as distributed organisms, or distributed Internet tribes, that live on the Internet and exists autonomously, but also heavily rely on specialist individuals or smaller organizations to perform certain talks that cannot be replaced with automation.


Hay mucho más que decir y razonar sobre las DAO. A lo mejor en algún momento vuelvo a ello pero, si no, no puedo dejar de recomendar todo el libro en que me estoy apoyando. De momento, y creo que suficientemente explicada la idea, vamos a reflexionar brevemente su carácter disruptivo.


Sobre el carácter disruptivo de las DAO


¿Son las DAO realmente algo tan disruptivo?

Ya hemos visto que Sherming Voshmgir considera que si.

Personalmente, no tengo una opinión del todo formada al respecto pero voy a expresar un 'bote pronto' bastante breve.

Creo que si las DAO se generalizasen, si se constituyesen en una alternativa masiva a otras formas de gobierno, dirección y control, constituirían, sí, un cambio radical, una disrupción profunda, aunque un cambio que no estoy seguro de que sea realmente deseable porque podría conducir a una suerte de anarquía de base tecnológica.

Un cambio que, en cualquier caso, creo que no depende para nada de la tecnología que, eso sí, es necesaria, pero que aunque evolucionará y mejorará, en realidad ya está aquí. Un cambio que, más bien, dependerá de si realmente preferimos un modelo de gobierno descentralizado o si, con todas las desconfianzas que puedan generar, y todas las decepciones que nos puedan provocar, pensamos que, de todas formas, es mejor disponer de autoridades centrales, unas autoridades deseablemente elegidas por todos mediante los mecanismos de la democracia.

Y dependerá también de la reacción de las propias autoridades actuales, en general centralizadas a estas formas de poder y gobierno descentralizado.

Sinceramente creo, e insisto que es un 'bote pronto', que esa adopción masiva del modelo DAO no se va a producir. Sí que creo que el concepto es interesante y atractivo. Sí creo que gozará de un cierto nivel de adopción y sí creo que, aunque no me convence como mecanismo de gobierno primario de la sociedad, esta forma de 'micro-gobiernos' P2P pueden servir de contrapeso y salvaguarda, a un poder y un gobierno quizá excesivamente centralizados y, por mor de esa centralización, siempre en riesgo de abuso y desvío de su objetivo teórico que no deja de ser el bien común..

Aunque sea una pena, aunque sea una demostración de un cierto fracaso ético de la raza humana, cualquier forma de poder necesita su contrapeso y quizá, sólo quizá, las DAO puedan servir como parte de ese contrapeso.


miércoles, 8 de junio de 2022

Principios de una identidad digital auto-soberana


Una de las aplicaciones de blockchain que quizá van más allá de lo evidente, de las criptomonedas, las transacciones y últimamente los NFT, es su uso para el establecimiento de una identidad digital, una identidad digital perfectamente fiable, conceptualmente centralizada y bajo el estricto control del usuario.


Identidades digitales


Identidades digitales, en realidad, tenemos muchas. Pensemos, por ejemplo, en la multitud de credenciales que usamos para el acceso a redes sociales o aplicaciones y los perfiles asociados. Y pensemos también en la versión digital de nuestro DNI, nuestro número de la seguridad social, nuestro carnet de conducir, etc.

Algunos de los problemas de este tipo de identidades digitales son dos:


  • Su propia variedad...pero una variedad desconectada, es decir, muchas identidades  independientes unas de las otras aunque, evidentemente, hay mecanismos (y muy utilizados en el mundo digital a efectos, por ejemplo, publicitarios) para 'graparlos' de alguna forma, para 'casar' unas identidades con otras y los diferentes datos sobre nosotros que existen en los diversos perfiles asociados a esas identidades.

  • Derivado de lo anterior, el poco control que el ciudadano, la persona, tiene sobre esas identidades y, sobre todo, los datos de su perfil.


Para hacer frente a esa problemática surge la idea de la identidad auto-soberana ('self-sovereign digital identities', SSI).


Identidades digitales auto-soberanas ('self-sovereign digital identities')


En las identidades digitales auto-soberanas, es el usuario el que controla sus propias credenciales y sus datos se necesita su permiso para usar esas credenciales, cualesquiera que sean.

En las interacciones basadas en identidad digital auto-soberana, y de cara al establecimiento de la necesaria confianza, una parte cualquiera debe presentar sus credenciales a la otra u otras y esta otra u otras pueden comprobar que esas credenciales provienen de un proveedor de confianza.

Además, en general, los sistemas de identidad auto-soberana se basan en esquemas distribuidos.

Y ¿de qué tecnología disponemos que sea distribuida, segura y que esté orientada hacia la confianza?

¡Bingo! Blockchain.

En efecto, las implementaciones de identidad digital auto-soberana se suelen apoyar en blockchain. Así sucede, por ejemplo, en la más que interesante iniciativa de la Unión Europea European Self-Sovereign Identity Framework (ESSIF).

La idea habitual es utilizar las 'wallets' (que, fundamentalmente, y otras funcionalidades de usuario aparte, son contenedores de la claves de un usuario) como medio para gestionar a unas credenciales que en realidad están descentralizadas en una plataforma blockchain.


Los principios de la identidad digital auto-soberana


Leyendo el libro 'Token Economy: How the Web3 reinvents the Internet' de Shermin Voshmgir me he encontrado una enumeración que hace la autora de cuatro principios de esta identidad digital auto-soberana, unos principios propuestos por Christopher Allen uno de los primeros en definir y apostar por este concepto de identidad digital auto-soberana. y que me ha parecido interesante traer aquí:


  • Acceso y control: Control directo de los datos de una identidad personal por parte de los usuarios incluyendo el control sobre el nivel de anonimidad.

  • Transparencia e interoperabilidad: Los algoritmos que gobiernen los datos relacionados con la identidad deben ser trasparentes, 'open-source', e independientes de cualquier infraestructura. Además, debería garantizarse una larga vida de estos datos, a poder ser para siempre o, al menos, mientras el usuario lo desee.

  • Portabilidad: Los datos relacionados con la identidad deben poder ser portados a otros servicios, de manera que no sean objeto de censura o control. Estas identidades portables garantizan que los usuarios permanecen con el control de sus identidades independientemente de los servicios que utilicen.

  • Consentimiento y minimización: Los usuarios deben aprobar, en todo momento, el acceso de terceros a sus datos personales. No solo eso, cuando se revelen datos personales, esta revelación debe implicar el menor número de datos necesario.


 Conclusión


Desde que lo descubrí, este concepto de la identidad digital auto-soberana me ha parecido muy interesante. Veo que, por un lado, favorece la privacidad y el control de la información personal por parte del usuario pero, además, lo veo incluso muy interesante desde un punto de vista práctico y operativo como forma de identificación y autenticación.

Y el hecho de que la Unión Europea se lo haya tomado tan en serio como para lanzar su propio mecanismo, me da confianza, por un lado, en la solidez del concepto y, por otro, en su implantación real a gran escala.

Esperemos a ver.


lunes, 6 de junio de 2022

Una conceptualización de los protocolos blockchain en cinco componentes

Blockchain es una de las tecnologías en la cresta de la ola desde hace algunos años, una tecnología que acompaña a otras como el Cloud, el Internet de las Cosas o la Inteligencia Artificial cuando queremos resaltar los grandes cambios que se están produciendo en el mundo digital.


Una experiencia personal sobre la literatura relativa a blockchain


La verdad es que siempre me ha parecido una tecnología algo compleja, difícil de entender y de explicar.


Tengo la impresión, tal vez injusta pero auténtica, de que los más especialistas en la materia tampoco han hecho, en general, grandes esfuerzos por explicarla de una manera sencilla. Puede ser una percepción errónea, o pura casualidad, pero cuando comparo la literatura que he leído sobre blockchain, con la relativa a otras tecnologías, algunas de ellas también bastante complejas, me parece apreciar como menos 'ganas' de hacerla realmente comprensible, de proporcionar explicaciones que, siendo ciertas, sean fáciles de comprender.

Debo admitir que, por suerte, últimamente mi percepción al respecto empieza a mejorar y, aunque cierta complejidad es inevitable (la tecnología es en sí misma compleja), parece que ya hay más voluntad, quizá más acierto, para explicarla de una forma más asequible.

En cualquier caso, esta es mi experiencia, y no necesariamente es generalizable ni cierta.

Sin embargo, me gusta cuando encuentro textos (o vídeos, o lo que sea) a los que veo con voluntad y acierto clarificador.


Cinco componentes de blockchain


Un poco en esa línea, he finalizado recientemente la lectura del libro 'Token Economy: How the Web3 reinvents the Internet' de Shermin Voshmgir, que se centra más en una visión económica que técnica (aunque entra bastante en lo técnico) y que, sin resultar absolutamente sencillo, creo que es bastante más clarificador que otros textos quizá, precisamente, por la voluntad de explicar más el significado e impacto económico que los detalles técnicos.  

Y repasando su contenido, me he encontrado un párrafo, que me parece interesante destacar, en que se intentan identificar los elementos que caracterizan a blockchain o, mejor, más que al blockchain exactamente, a los DLT ('Distributed Ledger Technology') o registros distribuidos de los cuales los protocolos blockchain, aquellos en que dicho registro se implementa como una cadena de bloques, son un subconjunto ampliamente mayoritario. Un predominio que provoca que, aunque no sea correcto, con cierta frecuencia se use el término blockchain y DLT como sinónimos.

Bueno, el caso es que la autora identifica cinco componentes que sirve para caracterizar a esos DLT y que son los siguientes:


  • Red: Una red física P2P formada integrada por ordenadores que ejecutan el mismo protocolo

  • Protocolo: Un protocolo que define las reglas de la red y garantiza su cumplimiento mediante consenso de todos los nodos de la red. Esto incluye incentivos económicos mediante tokens nativos.

  • Registro ('ledger'): gestión de todos los activos bajo la forma de un registro público y compartido de todas las transacciones desde el origen hasta el momento actual.

  • Identificación y direccionamiento: Los activos son propiedad de unas identidades que necesitan ser direccionadas de manera que podamos transferir valor entre una y otra. Estas identidades podrán ser más o menos anónimas según el caso.

  • Contratos inteligentes: para algunas redes, como Ethereum, los contratos inteligentes gestionan las relaciones de los actores involucrados y representan la lógica de negocio o gobierno.


Conclusión: sobre la claridad


Probablemente, si no se tiene ninguna noción de blockchain estos componentes por sí mismos, sin más explicación, no aclaren de qué estamos hablando y tampoco vamos en un post a explicar todos esos fundamentos. Pero sí me parece que, a poco que se tenga una idea básica, esta enumeración de componentes ayuda a estructurar con bastante claridad de qué estamos hablando.


Y, precisamente, claridad es lo que me gusta encontrar en la descripción de cualquier tecnología y, especialmente de blockchain ...


viernes, 3 de junio de 2022

Criptoeconomía o las transformaciones económicas debidas a blockchain

Cuando se revisan las grandes tendencias tecnológicas, los grandes espacios tecnológicos llamados a revolucionar nuestro sistema productivo, nuestra actividad empresarial, nuestra economía e, incluso, nuestra forma de vida, una de las que aparece recurrentemente desde hace unos años es blockchain.


Sobre el poder disruptor de blockchain



Puedo confesar que cuando hace unos años oía (leía, más bien) hablar de la gran disrupción que suponía blockchain era algo escéptico, inconfesadamente escéptico, pero escéptico al fin y al cabo. 

Y era escéptico en un doble sentido.

Escéptico, por un lado, acerca de la propia capacidad de este tipo de tecnología para madurar y ser realmente implantable a gran escala. Y escéptico, por otro, en cuanto a su verdadero poder disruptor, incluso suponiendo una maduración exitosa de la tecnología.

Aunque todavía, en cierto sentido, me mantengo observante y a la expectativa sobre esta tecnología, debo admitir, y me alegro de ello, que ha mejorado bastante mi percepción. Ha mejorado bastante, especialmente en cuanto a la maduración de la tecnología, que contemplo como ya realmente aplicable en muchos ámbitos y de forma más o menos amplia. 

Y, aunque todavía me parecen algo exageradas las predicciones de cambio radical y revolución de internet que se le han atribuido y atribuyen, sí veo cambios de cierta envergadura que puede llegar a introducir en las empresas, en Internet y en la economía en general.


Web 3.0


Tenía desde hace tiempo en 'mi debe' de lectura e investigación, profundizar algo más en la idea de la Web 3.0, un concepto que, en el fondo, y según compruebo, nos habla de la transformación de Internet por la presencia de blockchain, o si queremos ser más generalistas, de las DLT ('Distributed Ledger Technology') de las que blockchain, con todas sus variantes e implementaciones, forma parte.  

Para informarme en profundidad y ganar criterio, elegí (y he de decir que creo que estuve acertado) la lectura del libro 'Token Economy: How the Web3 reinvents the Internet' de Shermin Voshmgir, un gran libro, muy completo, que sin eludir en absoluto aspectos de tecnología, se centra más, precisamente, en las lógicas e impacto económico asociadas a blockchain, las DLT o, como la autora prefiere concebirlo o nombrarlo, la economía de los token


Criptoeconomía


Y la verdad es que me ha gustado mucho, y encajaba muy bien con lo que andaba buscando, el análisis que hace la autora con esa mezcla de tecnología y economía, buscando entender la lógica económica que hay detrás de las soluciones de blockchain (y DLT y tokens) y, a su vez, el impacto económico, de transformación económica, que dichas soluciones pueden tener.

La autora habla con cierta frecuencia de criptoeconomía que, en un momento de su libro define como:


Cryptoeconomics can be defined as the study of economic interaction in untrusted environments, where every actor could potentially be corrupt.


Debo decir que no me gusta demasiado esta definición, un tanto oscura, y que ni siquiera me gusta demasiado el término 'cripto' que antecede a 'economía' porque creo que pone demasiado peso en la criptografía. Es cierto que la criptografía juega un papel trascendental, imprescindible, en las soluciones de blockchain y DLT, unas soluciones que, precisamente, buscan la seguridad, la generación de confianza y la gestión confiable del valor.

Pero desde un punto de vista económico, creo que lo transformador no es la criptografía en sí misma, por imprescindible que esta sea, sino el modelo P2P de relación y transacción, el estado único, la trazabilidad, la gestión del valor...

En cualquier caso, término aparte, lo que sí me ha gustado, e impactado, es percibir, precisamente, como las soluciones DLT transforman el mundo económico desde una perspectiva que además, en cierto sentido, trasciende su aplicación en empresas o sectores concretos (que es lo que se suele analizar en otras tecnologías) para ser, más bien, una transformación de la economía en su conjunto, de los intercambios económicos, no tanto en su naturaleza profunda, eso sí, como en la forma en que se realizan, en su implementación.

El libro, por ejemplo, analiza las propiedades del dinero, analiza aspectos legales y políticos, menciona problemáticas como la estabilidad de cotización de criptomonedas (y otros token) o las motivaciones de las personas y empresas en su comportamiento económico, acudiendo con cierta frecuencia a conceptos de economía conductual.

Todo un mundo de transformación económica, incipiente aún, debido a las tecnologías DLT.


Conclusiones: a la expectativa


Sigo, todavía algo expectante, la evolución y sobre todo la implantación e impacto reales de blockchain, pero ahora con algo más de entendimiento de lo que trae consigo y si, también algo más de confianza.

Estaremos atentos al eventual despliegue de esta criptoeconomía, esta web 3.0, esta economía del token o como quiera que la queramos llamar.