La realidad virtual es quizá una de las nuevas tecnologías digitales más divertidas y emocionantes. La realidad virtual nos lleva a un mundo y una experiencias completamente nuevas, inventadas en cierto sentido por el desarrollador de la experiencia virtual.
Sin embargo, estrictamente hablando, la realidad virtual no crea una realidad nueva, no puede hacerlo, sino que nos 'engaña' en cierto sentido, haciéndonos pensar que esa realidad inventada es... eso, real.
¿Cómo lo hace?
Pues engañando a nuestros sentidos. Percibimos la realidad a través de los sentidos, así que si queremos hacernos creer en una realidad que no existe, la única forma es lograr que los sentidos perciban esa realidad virtual tal y como si se estuviese desarrollando en el mundo exterior.
Tony Parisi en su libro 'Learning Virtual Reality' expresa esta idea de la siguiente forma:
Virtual reality has one goal: to convince you that you are somewhere else. It does this by tricking the human brain - in particular, the visual cortex and parts of the brain that perceive motion.
La realidad virtual, pues, lo que hace es crear ilusiones y convencernos de que esas ilusiones realmente existen.
Sin embargo, y a partir de aquí comenzamos una breve digresión filosófica, el propio autor recoge poco antes la siguiente cita de Albert Einstein:
Reality is merely an illusion, albeit a very persistent one
Creo percibir en la cita del físico alemán, una cierta socarronería, un cierto humor. Pero, al mismo tiempo, un trasfondo de pensamiento filosófico.
Aunque reconozco que mis conocimientos filosóficos son débiles y se me pierden un poco en las nubes del tiempo, leyendo el libro de Parisi, se me vinieron a la cabeza retazos de doctrinas filosóficas, estudiadas siendo yo apenas un colegial, en que se discutía acerca de la naturaleza de la realidad.
En esa discusión, había corrientes que aseguraban que existía una realidad fuera completamente de la conciencia humana (realismo), mientras que otras afirmaban que la realidad es una mera construcción de la conciencia humana (idealismo). Y algunas, se situaban en una posición intermedia, como la fenomenología, que admite como posibles fenómenos dentro y fuera de la experiencia humana pero se centran en lo que ésta puede captar a través de los sentidos (fenómenos).
Sin pretender en ningún modo, ni haber recogido de forma muy rigurosa ni por supuesto completa el pensamiento filosófico al respecto de la realidad, la conciencia y la experiencia sensorial, ni sentar ningún tipo de doctrina, me pregunto cómo interpretarían los creadores de esas doctrinas filosóficas la realidad virtual, cómo podría afectar a su definición y concepción de la realidad y su relación con la conciencia humana, la existencia de una tecnología que permite a los humanos crear realidades nuevas y hacerlas tangibles para otros humanos con sólo engañar a sus sentidos y, con ello, de alguna forma, alterar su conciencia.
¿Qué pensarían, muy especialmente, aquellas corrientes que ponen más peso en la conciencia y la experiencia como fuente de la realidad? ¿Considerarían a las experiencias creadas mediante realidad virtual como auténtica realidad?
¿Existen filósofos hoy día que se replanteen el concepto de realidad con base en lo que está aportando la tecnología, muy especialmente la realidad aumentada y, sobre todo, la virtual?
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