Hace un par de meses repasábamos las ideas que vertía Nicholas Carr en su último libro 'Superficiales'. El razonamiento fundamental de Carr, basándose en algunos principios de neuroplasticidad, era que el modo de trabajo con Internet, con sus constantes interrupciones en forma de mensajes, actualizaciones, tweets, etc afectaba a nuestra atención que tendía a separarse de la lectura profunda y concentrada para centrarse en ese régimen casi frenético de interacciones, en una atención superficial. Dada la existencia del fenómeno de la neuroplasticidad, la adaptación anatómica del cerebro a la actividad intelectual que realiza, concluía que esa continua interrupción moldea de forma permanente nuestro cerebro y no de forma metafórica sino física.
En su libro 'Vivo en el futuro...y esto es lo que veo', Nick Bilton, bien es verdad que sin aportar una teoría o unos datos alternativos, parece disentir de este razonamiento. De esta forma lo razona:
"Si tu principal miedo es que nuestra habilidad para reflexionar o para concentrarnos en un asunto se vea arrollada por el torrente de nueva información, relájate. Incluso con este cambio el contenido extenso no morirá. Los niños pueden parecernos distraídos pero pueden pasarse una media de tres horas diarias jugando con videojuegos, lo cual me suena a contenido extenso. Si no se terminan un libro en dos días o no se están quietos viendo un programa de televisión, no es porque no puedan concentrarse: es porque no hemos adaptado nuestro modo de contar historias a sus nuevos intereses. Son 'consumívoros', hurgando, consumiendo, distribuyendo y regurgitando contenidos en paquetes de bytes, aperitivos y comidas completas"
Parece, pues, que Bilton atribuye esa presunta falta de concentración más bien a una falta de adaptación de los contenidos a los intereses de esa nueva generación de 'consumívoros' y a una cierta resistencia al cambio o miedo al futuro, más que a una incapacidad para consumir lo que él determina contenido extenso. De hecho, Bilton vierte las afirmaciones que hemos visto más arriba después de repasar las resistencias que sufrieron en sus primeros tiempos algunos otros avances como la imprenta, el ferrocarril o la televisión.
¿Quién tiene razón?
Parecen más fundamentados teóricamente y más rigurosos los razonamientos de Carr...pero más esperanzadores y más acordes con la experiencia del pasado las afirmaciones de Nick Bilton.
El tiempo dará y quitará razones. El tiempo... y 'los consumívoros'.
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