miércoles, 26 de junio de 2019

Mi Actividad: Rigor y fe, o reflexiones tras la presentación de mi libro "La Carrera Digital"


Cuando esto escribo, tengo muy vivas todavía las emociones sentidas en el día de la presentación de mi libro "La Carrera Digital".

Como expliqué al iniciar mi intervención, ayer era un día muy especial para mi. Y lo era, no sólo por la presentación del libro, que ya de por sí es bastante motivo, sino porque, de alguna forma, marcaba de manera simbólica un hito en una transformación personal y profesional en la que llevo inmerso algo más de un año, pero que ya tenía planificada desde bastante antes..

Hace algo más de año me formulé para mis adentros una nueva misión, una misión que es fundamentalmente profesional pero que también me implica en lo personal y en la ejecución de unos valores firmemente asentados.

Me he propuesto ayudar al tejido empresarial español, y si es posible, hispano, especialmente a directivos y PYMEs, a entender y aprovechar todo lo que la tecnología digital puede ofrecer. Me he propuesto situarme en un plano que conjugue una visión dual negocio-tecnología, ayudando a los directivos a entender la tecnología y a los tecnólogos a comprender cómo esta se incardina en el negocio. Y me he propuesto proporcionar contenidos y directrices rigurosas y realistas pero comprensibles. Y mi forma de entregar ese valor es mediante asesoría, mediante docencia... y mediante la publicación, hasta ahora en el blog y, desde ahora, también en formato libro.

Ayer, por primera vez, expresé en voz alta y en público, esa misión.

Ayer, expliqué, al hilo de los contenidos del libro, mi marco conceptual para una transformación, incluso más allá de la digital, que se apoya en tres pilares: el conocimiento, el método y la acción.

Y ayer expresé también los dos valores que complementan ese marco: el rigor y la fe. El rigor, que tiene que ver con el conocimiento y con el método, el rigor que es adecuación intelectual y metodológica, que es hacer y contar las cosas correctas, verdaderas, relevantes. 

Y fe que es confianza en la visión y en las propias capacidades, que es resiliencia y convicción en la consecución de los objetivos.

La presentación de ayer fue, creo, bonita, interesante, polifacética y participativa. Y me sentí muy, muy a gusto. Un día para recordar.

Unas gracias inmensas a todos los que acudisteis. Habéis formado parte de un día singular para mi, y vuestra presencia en tan especial momento, no se me va a borrar de la memoria.

Pero el mensaje que quiero transmitir, para que de cumplimiento a mi misión, necesita público, mucho público. El público de ayer era maravilloso, el mejor que uno pueda desear... pero escaso. ¡Eché de menos a tanta gente y tantos colectivos!

¿Qué voy a  hacer ahora, entonces?

En realidad ya os he dado alguna pista...

Creo que en el libro, e incluso en la presentación, he dado pleno cumplimiento al rigor. Y ahora, para extender el mensaje, para que más allá del público de ayer mi voz se escuche mucho más lejos, llega el momento de la fe. Ayer fue un día muy, muy especial... pero no el único.

Voy a persistir en transmitir el mensaje, en cumplir mi misión.

En realidad, la carrera acaba de comenzar...

Bienvenidos



2 comentarios:

  1. Me habría gustado mucho estar ayer en la presentación; pero me encontraba a unos cuantos kilómetros de distancia.

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    1. Si, me hubiera gsutado que estuvieses allí, pero lo que no se puede, no se puede...

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